Eva Yerbabuena interviene como una de las ponentes de Centre Stage, un proyecto, financiado por el programa Europa Creativa de la UE
E
va Yerbabuena ha participado esta tarde en Málaga en la presentación y desarrollo del proyecto europeo Centre Stage junto a la delegada de Cultura en Málaga, Carmen Casero. Esta iniciativa pretende reducir los desequilibrios de liderazgo que se observan en las artes escénicas de los países participantes: España, Irlanda y Suecia. Málaga está siendo el lugar de celebración de este proyecto, al que asisten 24 mujeres (ocho de cada país), que recibirán formación y asesoramiento con el objetivo de reforzar sus carreras más allá de sus fronteras.
Este proyecto, financiado por el programa Europa Creativa de la UE, está liderado por Kultur i Väst (Suecia) y cuenta como socios con Theatre Forum (Irlanda) y la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico a través de la Agencia Andaluza de Instituciones Culturales (España).
Después de la presentación, la bailaora, coreógrafa y directora artística Eva Yerbabuena se ha incorporado como ponente a este proyecto dentro del simposio ‘Programar para la diversidad’ junto a Paqui Romero y Sara Gómez, bailarinas de Danza Mobile, entre otros. Yerbabuena ha expresado su inquietud por la conciliación familiar: “venimos a hablar sobre las necesidades, carencias y experiencias que hemos vivido por ser mujer, pero también por ser directoras, intérpretes, coreógrafas, y también mamás, una condición que afecta enormemente a nuestra carrera profesional porque nos supone un parón para el que demandamos más apoyo”.
En este sentido, la artista considera que uno de los mayores lastres que padecen el colectivo de artistas es la falta de estabilidad económica: “vivir cada día preguntándote si el mes que viene habrá trabajo es muy duro no sólo por ti, sino por todas las familias que dependen de tu proyecto”.
Yerbabuena cree que el hecho de ser mujer no puede mermar las energías para alcanzar las metas propuestas y que, aunque nunca ha padecido discriminación, ha tenido que enfrentarse muchas veces a retos difíciles. “Pero eso nunca me ha frenado”, ha indicado la bailaora. “Cuando he considerado que existía una injusticia he trabajado duro, peleado y luchado por que eso cambiara y animo a todas las creadoras, intérpretes y trabajadoras de las artes escénicas a que hagan lo mismo y luchen por lo que creen”, ha apostillado.
